Monzón fue honestidad brutal refiriéndose al equipo: “La gente puede putear, no les demostramos nada”.
No se encuentra todos los días en un ámbito tan trillado como el del fútbol a protagonistas que se descarguen con tanta franqueza y sencillez como Gastón Monzón. Después de la derrota frente al equipo B de Banfield, el arquero de Huracán fue autocrítica pura, traslúcida: “No sé qué nos está pasando. La verdad es que ayer fuimos un equipo muy tibio, como sin ganas. Tenemos que mejorar muchísimo la actitud.
-¿Es un problema de actitud entonces?
-Sí, entre otras cosas. Nosotros sabemos que no tenemos un juego muy vistoso pero en este campeonato, si tuvimos momentos positivos, fue más por la actitud que demostramos que por otra cosa. La actitud es lo mejor que tenemos. Y con Banfield nos faltó eso, igual que contra San Lorenzo. Con Independiente, por ejemplo, fuimos pura actitud, y pudimos haber ganado el partido. Pero el otro día...
-Se te nota con mucha bronca.
-Sí, claro. Da bronca que el otro día no hayamos pateado al arco prácticamente. Pareció como que salimos a la cancha a mantener el cero y cuando nos hicieron un gol no se nos cayó una idea para empatarlo. Igual ojo, no hay que puntualizar sólo en el ataque, es un tema de todo el equipo.
-Entonces entendés los reclamos que les hace la gente, ¿no?
-¡Cómo no lo voy a entender! Claro que los comprendo. Ellos tienen que exigirnos siempre más. Y pueden putear, es razonable, si no les demostramos nada. Dentro de la cancha parecíamos entregados. Porque nosotros perdimos, sí, pero no terminamos el partido metiendo en un arco a Banfield al menos, no generamos situaciones de gol ni con juego asociado ni a los tumbos. Además, ni siquiera enfrentamos a los titulares de Banfield. Los chicos que presentaron ellos podrían ser titulares en cualquier equipo, eh, pero sabemos que no es lo mismo.
-¿Se le puede ganar a Boca así?
-No, no, es que si contra Boca jugamos así nos comemos cinco, no te voy a mentir. Es así de clarito, tenemos que cambiar muchas cosas, empezando por la mentalidad. Y Boca no es el mismo que el de hace cuatro fechas. Viene de ganar dos partidos seguidos muy importantes, dos clásicos, y está entonado. Va a estar difícil, pero confío en que podemos revertir la imagen.